Hola a todos
¡Feliz día de Reyes!Escribía un sabio neoplatónico:
Citar:
“Así pues, Cristo es nuestra epifanía –esto es, nuestra aparición y nuestra manifestación. En efecto, aunque son tres las sustancias del Bien sumo, una sola de ellas se nos apareció en Cristo Hombre –esto es, en el Verbo encarnado- y se hizo comprensible a los sentidos corpóreos. Así es: nadie ha visto al Padre, ni al Espíritu Santo en unidad de sustancia con la criatura.”
(Juan Escoto Eriúgena)
Estas Navidades pasadas, una vez más, delante de la portada occidental del templo de San Miguel de Biota, mis hijos me comentaron con cara de ilusión:
"Hoy, sí que se ven bien los caballos de los Reyes Magos." Aquí, esculpidos, los reyes magos.
(Portada oeste del templo de San Miguel de Biota, Zaragoza)
Como otras veces hemos comentado, en la arquivolta, todavía queda rastro de sus caballos, que fueron pintados.
Esa sí que es una relación de continuidad, es decir, la unión que tienen entre sí las partes de un todo continuo, los reyes magos y sus tres caballos. Es decir, se utilizó en el exterior del templo una técnica mixta basada en esculpir la escena central en el tímpano y en pintar lo accesorio, en este caso, los caballos de los reyes.
¿Por qué poner la cita inicial?, os preguntareis.
Esta iconografía remite a la fiesta de la Epifanía. En el calendario litúrgico, sólo hay una celebrada el 6 de enero. Esa fiesta ha quedado reducida al símbolo de la Adoración de los reyes magos.
Tal vez por esto, este concepto teológico, la divinidad se ha unido a la humanidad de Cristo, no siempre se ha celebrado (del verbo latino celebro, que entre otros significados tiene el de “hacer público”) a través de un solo pasaje neotestamentario y se utilizaron para completarlo dos teofanías de la edad adulta del Hijo de Dios. La cita de Polemio Silvio, historiador de las Galias de mitad del s.V, así lo pondría de manifiesto. La fiesta de la Epifanía se recrearía en tres momentos:
1. La Adoración de los Reyes Magos.
2. El bautismo de Jesús en el Jordán.
3. La boda de Caná.
La fiesta es una, en singular, Epifanía, las manifestaciones tres. Por eso, teofanías en plural. Estos tres pasajes neotestamentarios explican el concepto de la Encarnación. ¿Por qué Jesús de Nazaret es el Hijo de Dios?:
1. Como tal, ha sido reconocido por los sabios y reyes de la tierra ya en su infancia: Él todavía no puede manifestarse como Dios, pues es un niño (Mt. 2,11). Algunos de los evangelios llamados apócrifos lo son por presentar demasiado divino al Niño Jesús.
2. Como tal, ha sido reconocido por el último profeta que anunciaba la inminente llegada del Mesías, San Juan Bautista: Él acepta el plan salvífico de Dios (es el Mesías) y, por lo tanto, la superación de la antigua fe judía. El bautismo es el primer rito sacramental que diferencia el judaísmo del cristianismo. Además, ¿existe algún otro pasaje de los evangelios que explique mejor el concepto de la Trinidad que el bautismo trinitario del evangelio de San Juan o segundo testimonio de Juan el Bautista?. (Jn. 1, 31-34)
3. Como tal, ha sido reconocido por su madre (la Virgen María) que es la que le induce a que haga el primer milagro y por los discípulos: “Este fue el primer milagro que hizo Jesús, en Caná de Galilea, y manifestó su gloria y creyeron en Él sus discípulos.” (Jn. 2, 11) Ahora sí que Cristo actúa como Dios al obrar su primer milagro.
Esas tres teofanías de la Encarnación llegaron a celebrarse juntas en una única fiesta conocida como de la Epifanía celebrada el 6 de enero. ¡Feliz día de Reyes!Un abrazo a tod@s