Hola a todos
¡Quió!, demiguel, me cuesta mucho escribir cada entrada. Ya ha pasado una semana y no me lo acabo de creer. Mis dedos no son ágiles. Cada día, ha sido un suplicio abrir el ordenador. Por suerte, en este foro, tengo amig@s que son muy valientes y nos han dado una magnifica lección de trabajo y responsabilidad.
Mis ideas no fluyen. Se quedan estancadas. Me hubiese gustado leer el testimonio público de más personas. Pero, cada uno expresa su dolor de manera personal y diferente. Esto es muy duro. Por eso, te vuelvo a poner algo sobre en lo que en su día ya hablamos.
Citar:
“Sin embargo, yo he considerado que los santos y los filósofos, expertos en la investigación veraz de las cosas, profesaron públicamente la doctrina.”
(Juan Escoto Eriúgena)
Siempre he creído que una de las mejores expresiones de la alegría consiste en tener la suerte de tener personas con las que poder compartir las mejores cosas de la vida, como el diálogo. ¡Echo tanto de menos nuestras conversaciones telefónicas semanales..! Me falta tu voz...
Así dejaron constancia, en el templo de Santiago de Agüero, Huesca, el tema iconográfico del diálogo:
"Defensa de la alegrÍa
IN MEMORIAMi
...
Defender la alegía como un destino
defenderla del fuego y de los bomberos
de los suicidas y los homicidas
de las vacaciones y del agobio
de la obligación de estar alegres
defender la alegría como una certeza
defenderla del óxido y de la roña
de la famosa pátina del tiempo
del relente y del oportunismo
de los proxenetas de la risa
defender la alegría como un derecho
defenderla de dios y del invierno
de las mayúsculas y de la muerte
de los apellidos y las lástimas
del azar
y también de la alegría."(Mario Benedetti)
Nada, ¡quió!, demiguel, aquí nos dejaste y aquí estamos.
Un abrazo a tod@s