CASTELO DE OLIVEIRA - GUIMARAES
Guimaries o Vimaranes, no parece haber sido una ciudad romana, pero está a sólo quince kilómetros de Braga, Metropolitana de la iglesia cristiana desde el año 400 dC y capital de la Gallaecia romana desde mucho antes.
Sin embargo, originariamente su catedral fue restaurada por el obispo Pedro y consagrada en 1089. El conde Henrique trajo obispos cluniacenses, St Gerald 1106-1109, y Maurice 1109-1119 y la actual iglesia gótica todavía sigue un plan cluniacense, tal vez por los modestos recursos que emplea en su construcción, se adapta a la ciudad moderna con un aire más pastoral que las catedrales románicas de Oporto y Coimbra.
La región del Minho llegó a poseer unos veintisiete castillos, quince torres(señoríos fortificados) y cuarenta y nueve monasterios. Trás-os-Montes también tenía, o llegó a tener numerosos castillos, pese a tener una población mucho menor, junto a algunos monasterios.
Los castillos podrían construirse sólo con el consentimiento del rey, quien nombraba el gobernador de cada población. A menudo surgieron de pequeños emplazamientos fortificados, construidos como bastiones adyacentes a la mansión del propietario de la tierra para defenderse de los invasores. Eran 'cubos' de granito de dos o tres pisos, con aberturas sólo para ventanas saeteras situadas a partir de un primer piso. El de la familia Silva con vistas al Miño detrás de Valenta se ha restaurado para hacer una confortable y cómoda residencia.
Ya en el siglo XIII, la monarquía puso fin a las luchas de los barones y el rey Diniz mandó construir castillos para la defensa de las fronteras, que se convertían a su vez en la casa residencia de cada noble. Su favorito era el castillo de Leiria, ahora completamente restaurado. Muchos de los castillos del "rey dionisiaco" probablemente fueron reconstruidos sobre aquellos puntos fortificados ya existentes y se adornaron con galerías abiertas a un nivel superior, de manera a como eran usados en el sur musulmán o como en el palacio perdido del Varandas en Silves y en Alcácer do Sal. Un buen ejemplo de la torre, amplificado por galerías posteriores o arcadas, es Bertiandos, cerca del borde de la carretera al este de Viana do Castelo. Los dos clanes más destacados de aquella época, fueron los Maias al norte de Oporto, donde hay un "cerro de Maia" sin restos arqueológicos reseñables, y los Sousas, reunidos junto a un pequeño arroyo en un amplio elenco del valle de Oporto.
PAÇO DE SOUSA (Penafiel)
El Paço de Sousa pertenecía a Egas Moniz, el tutor de Afonso Henriques, quien adquirió una enorme riqueza. Su tumba se encuentra en el monasterio adyacente y aunque el edificio fue dañado por un incendio en 1426, ha sido restaurado reciéntmente.
Un número de iglesias en el Minho probablemente datan del siglo décimo. La iglesia monástica habitual era un edificio rectangular de piedra, con una sola nave, separada por un arco triunfal del santuario e iluminada por ventanas en arco sobre la nave. Laq entrada se efectua por una puerta principal situada en el oeste con columnas arqueadas con mayor o menor escultura y coronada generalmente por un rosetón. Hubo al principio algunos transeptos, altares laterales, sacristía, coro y/o púlpito En ocasiones puede haber un nártex para las mujeres, y un campanario independiente. Después de la reforma cluniacense y la reconstrucción de las catedrales en forma grandiosa, las iglesias se les dio naves adicionales y se agregaron claustros. Además una torre defensiva o almenas, suelen ubicarse cerca de la costa o los ríos. La forma más simple sobrevive mejor en lugares pequeños o remotos.
No muy lejos del Paço de Sousa se encuentra Cete, una iglesia del siglo X ampliada para Teresa (Tarasia o Tareja) de Borgoña y Henrique, un largo estrecho edificio con una torre almenada, un contrafuerte macizo y redondeado ábside. Otras iglesias románicas están en Meincdo, Vila Boa de Quirós y la pequeña iglesia de Boelhe, de sólo doce metros de largo, pero adornada con figuras de piedra y flores.