Hola a todos
En el Arte románico, los detalles plásticos esconden la gran preparación intelectual de los teólogos redactores que idearon la colección de imágenes que, después, ejecutaron los maestros artesanos. De hecho, como muchos conocéis, soy de la opinión de que no existe una verdadera interpretación de las imágenes sino se conoce el pensamiento en el que se idearon. Por eso, siempre escribo que los redactores de los programas son los grandes olvidados en el estudio del Arte Románico.
Para que me entendáis, podemos hablar de primer maestro de Silos, de segundo maestro de Silos; sin embargo, detrás del trabajo de cada uno de estos maestros está la obra de pensamiento de diferentes redactores.
Como ejemplo de lo que quiero explicar, muestro un capitel temático muy especial: Adán y Eva vestidos con túnicas de pieles.


Esta iconografía se encuentra en la portada de Santa María de Uncastillo, Zaragoza.
En la escultura, tanto Adán como Eva lucen unas túnica de pieles tal y como se indica en el libro del
Génesis:
Citar:
“Les hizo Yavé Dios al hombre y a su mujer túnicas de pieles, y los vistió”
(Gén. III, 21)
Sin embargo, sobre este versículo, un viejo conocido nuestro hizo el siguiente comentario exegético en el siglo IX:
Citar:
Y para que conozcas la creación de nuestro cuerpo mortal respecto a Éste por cuya decisión se realiza todo lo que se lee referido muy claramente a nuestra educación, renovación y salvación, escucha la Sagrada Escritura que dice: “El Señor Dios hizo también a Adán y a su mujer unas túnicas de piel y los vistió”. En este texto, entendemos que con las palabras de túnicas de piel no se significa otra cosa que los cuerpos mortales que los primeros hombres se hicieron para ellos.”
(Juan Escoto Eriúgena)
Según Eriúgena, las hermosas túnicas de pieles que, en Santa María de Uncastillo, lucen tanto Adán como Eva no serían otra cosa sino que el símbolo de sus cuerpos mortales. Por eso, la presencia del Árbol del conocimiento y de la serpiente. Los dos han pecado y se han convertido en mortales. El pecado les privó de la gracia de la inmortalidad que Adán y Eva compartían en el Paraíso con los ángeles.
En la piedra, la realidad del texto bíblico y su interpretación de naturaleza teológica. Está claro que detrás del trabajo manual del maestro artesano se esconde la gran preparación intelectual del redactor que lo ideó. De ahí que el fragmento diga:
"En este texto, entendemos...". Colocar a Adán y Eva con el símbolo de las túnicas de pieles junto al Árbol del conocimiento y la representación de la serpiente bíblica habla no solo de un lector que interpreta el pasaje bíblico en forma recta, sino también de alguien que conoce su exégesis neoplatónica, esa vigente en la realidad histórica del siglo XII y que se estudiaba en París o Chartre. Una realidad que era bien conocida en el obispado de Pamplona gracias al trabajo de difusión de Robert de Ketton, gran conocedor del pensamiento de Eriúgena (lo había estudiado en París y Chartre) y arcediano de la Valdonsella aragonesa, perteneciente al obispado de Pamplona, cuya casa madre no era otra que este templo de Santa María de Uncastillo.
Conociendo toda esta realidad histórica y la evolución del pensamiento de la época es como se puede disfrutar de manera plena este hermoso capitel de Santa María de Uncastillo en la provincia de Zaragoza.
Por eso, no todo está escrito en el estudio del Arte Románico y todavía hoy se puede volver a pasar sobre los diferentes estudios con otros ojos. NO todo se queda en describir los estilemas o rasgos formales que dejaron los maestros artesanos en sus obras de arte; los detalles plásticos esconden el pensamiento del teólogo redactor que los ideó.
Soy de la opinión de que sin la visualización en un estudio de los dos trabajos (la factura manual y la expresión del pensamiento) y la realización de la correcta contextualización histórica no se puede dar una verdadera interpretación de las imágenes que se analizan. Por eso, aunque a juzgar por la osadía de algunas páginas y estudios parezca lo contrario, aprender y entender la esencia del Arte Románico lleva muchos años. Por este motivo, el que os escribe todavía se siente un aprendiz que devora todos los estudios que caen en sus manos con la misma ilusión que un niño en la víspera de la llegada de los Reyes Magos.
Un abrazo a tod@s