Hoy, hablemos un poco de la festividad que se celebra hoy, San Juan Bautista. Según los diagramas del MDJ, mientras que en la pared interior del ábside en su lado norte, junto al arco triunfal, se colocó la figura de San Juan el Bautista, en la pared interior en su lado sur, se colocó a San Juan Evangelista.
Teniendo en cuenta que la festividad de San Juan el Bautista (24 junio), la colocada en la cara norte, se identifica con el solsticio de verano y que la festividad de San Juan Evangelista (27 de diciembre), la colocada en la cara este, se identifica con el solsticio de invierno, estas dos figuras nos estarían dando este esquema.
Por su ubicación, las pinturas dedicadas de forma personalizada a los dos San Juan son las únicas que no hablan de forma directa de la vida humana o hagiografía de Cristo. Por eso, su colocación rompe el desarrollo cronológico, pues están colocadas a propósito en esos ángulos y en una dirección concreta. Además, no parecen pertenecer tampoco a episodios de las hagiografías de los dos santos y se diría que están realizadas con toda la intencionalidad del mundo.
Pero, en Bagüés, estas dos imágenes están relacionadas, visualmente y en forma de triángulo, con la famosa crucifixión que preside la parte baja del ábside. Un tema iconográfico que simboliza a la vez tanto la Pascua cristiana como la fiesta de la Exaltación de la Santa cruz, festividades cristianas que nos llevarían a los equinoccios de primavera y de otoño respectivamente. Además, en medio y sobre la cabeza de Cristo, está situada esa ventana absidal por donde entraría el
EGO SVM LVX MVNDI. O lo que es lo mismo, una nueva representación simbólica del comentario realizado por Eriúgena a Martianus Capella en su comentario a su
De nuptiis Philologiae et Mercuri:
Citar:
Triangulus ignis Triangulus dicitur ignis sol
quia tres motus per singulos annos habet; aut enim in augmentum luminis
surgit aut in decrementum descendit aut luminis tenebrarum aequalia
facit spatia. In uno angulo facit aequinoctium, in altero solstitium
aestivum, in tertio solstitium brumale.
(Iohannis Scotti Annotationes in Marcianum)
Visualmente, lo podéis comprobar vosotros mismos.
En Bagüés, está figurada esta magnífica expresión simbólica de la teología de la luz. Sigamos un poco. Empecemos por la prolongación de la marca del solsticio de verano, muro norte del templo de Bagüés, en la que está representado San Juan Bautista:
¿Qué pasa con su prolongación natural? Una obviedad, nos lleva hacia el tema iconográfico del Bautismo de Cristo por San Juan, el Bautista; es decir, el simbolismo del agua. ¿Estará relacionado tradicionalmente el simbolismo del agua con el 24 de junio, el solsticio de verano, en el territorio del antiguo arcedianato de la Valdonsella y, en concreto, en Bagüés?
Citar:
“Pero el santo más celebrado de junio es sin duda San Juan, 24 de junio, cuya festividad coincide con el solsticio de verano. La noche de San Juan, la más corta del año, es considerada como mágica y tiene la capacidad de dotar de una virtud especial a objetos y seres comunes. Esa noche el agua tiene “mérito” (sic), un poder especial que permite curar o prevenir las enfermedades. Al acto de ir a lavarse a algunas fuentes o río cercano durante esa noche se le llama “sanjuanarse” (sic) y todavía pervive la costumbre el algunos pueblos... En Bagüés ponía agua en la ventana y luego la echaban por los campos.”
(Luís Miguel Bajén García, Mario Gros Herrero, La tradición oral en las Cinco Villas: Cinco Villas, Valdonsella y Alta zaragoza, Diputación de Zaragoza, 1994, pp. 184-195)
Continuemos por la prolongación de la marca del solsticio de invierno, muro sur del templo de Bagüés, en la que está representado San Juan Evangelista:
¿Qué pasa con su prolongación natural? Otra obviedad, pues nos conduce al ciclo de la Navidad, es decir, al 24 de diciembre, el solsticio de invierno, la Navidad y a la festividad de San Juan Evangelista, 27 de diciembre.
Llegados a este punto, es necesario volver a leer a Eriúgena y su comentario sobre el versículo del evangelio de San Juan:”
Illum oportet cresceré, me autem mimini.”, es decir: “Conviene que él crezca y que yo mengüe.” Realizo una traducción coloquial del texto latino, para no aburrios con tanto latinajo, en la que Eriúgena se pone en el papel de San Juan el Bautista para explicar lo que significa este versículo. Intentaré ayudar la explicación con datos que ya hemos comentado):
1.
“Yo seré degollado (POR CIERTO Y AUNQUE HABLÉ EN UN ESTUDIO DE ELLA, DE LA CAJA DE RELIQUIAS ENCONTRADAS EN BAGÜÉS, A LA MANERA DE SAN JUAN BAUTISTA, LAS RELIQUIAS DE TODOS LOS SANTOS HOMBRES INTRODUCIDOS EN LA LIPSANOTECA DE BAGÜÉS PERTENECEN A MÁRTIRES QUE FUERON DEGOLADOS O DECAPITADOS COMO ÉL). El estudio
Un misterio románico: la arqueta de reliquias de Bagüés, Zaragoza, lo podéis leer de forma gratuita en el siguiente enlace:
https://www.academia.edu/21597757/Un_mi ... s_Zaragoza2.
Él será exaltado en la cruz (CENTRO ICONOGRÁFICO QUE ESTAMOS ANALIZANDO),
3.
para que sea conocido por esto; ya que conviene que él crezca sobre todos de manera perfecta en las mentes (EN LA CABEZA DE CRISTO SE INTRODUCE LA LIPSANOTECA CON RELIQUIAS DE UN ÁNGEL, TRES HOMBRES Y DOS MUJERES, EL SÍMBOLO DE LAS DOS NATURALEZAS DE CRISTO, LA HUMANA Y LA DIVINA) de
todos los que creen en él, para que yo mengüe... 4.
Eso esto significa, pues él crecerá con la apertura de la luz, pues las tinieblas decrecerán cuando él haya nacido (EL NACIMIENTO DE CRISTO, 24 DE DICIEMBRE, SOLSTICIO DE INVIERNO);
5.
yo disminuyo con la apertura de la luz, pues las tinieblas crecerán cuando yo haya nacido” (EL NACIMIENTO DE SAN JUAN BAUTISTA, 24 DE JUNIO, SOLSTICIO DE VERANO).
Esta noche pasada, desde el punto de vista cristiano, hemos celebrado el solsticio de verano, con fuego (las famosas hogueras), pero en algunas zonas también con agua. Es decir, en estas pinturas de Bagüés, teología de la luz en su estado puro. El versículo del evangelio de San Juan, pronunciado por el otro San Juan, el Bautista, interpretado por un tercer Juan, Escoto Eriúgena, desde la clave del EGO SVM LVX MVNDI a partir de las festividades cristianas de la Natividad de Cristo, 24 de diciembre, solsticio de invierno, y de la Natividad de San Juan el Bautista, 24 de junio, solsticio de verano. En definitiva, un texto de naturaleza teológica que puede constituir en sí mismo una lección teológica que encaja, de forma natural y sin forzar el contexto, con los detalles plásticos del conjunto iconográfico de Bagüés.
Un abrazo a tod@s