Hace unos días algún allegado que no recuerdo me provocó para registrarme en Face Book, cosa que hice, y desde entonces tengo un buen lio, porque parece que soy amigo de mis amigos y que mis amigos son mis amigos aunque no lo sean, o algo parecido. Basta con ver el tema de la Cim d´Estela para comprender que a mí estas cosas tan complicadas me superan. Me da la impresión que el Face Book no es más que otra herramienta para comunicarse en un mundo en el que empiezan a sobrar correos spam y vías de comunicación. Me imagino en un mundo feliz en el que me den soma para ocuparme de estas cosas en lugar de aportar temas y sistemas útiles. Como no voy a llevar un registro de donde me he apuntado y donde no y a quien he apuntado y a quien no y si aquel merece la pena o no, y no estoy dispuesto a investigar en Face Book si lo llevo bien y al día o no, he decidido pasar de todo eso y regresar de hecho al limbo en que antes me encontraba. Claro que si alguien tiene una idea mejor en la que se demuestre la utilidad de esta herramienta en relación con el románico de forma diferencial, es decir, de forma que no se pueda hacer con las herramientas que ya disponemos, pues que lo diga, que se lo agradeceré. Saludos.
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