Mañana fría y lluviosa en El Escorial, que no impidió que la sala de actos de la Casa de Cultura de la calle Floridablanca llenase 2/3 partes de su capacidad, para escuchar la conferencia del Ilmo. Sr. Don Wifredo Rincón García, en relación con "El Románico español en el siglo XIX: Visiones y perversiones". Asistían al acto Don José Antonio Vara Moreno, Concejal de Cultura del Excmo. e Iltre. Ayuntamiento de esta localidad y el Padre Prior del Monasterio de San Lorenzo, Don Antonio Iturbe Saíz. Por Círculo Románico se encontraban presentes en la sala, su Vicepresidente, Don Jesús Blázquiz Magán y el Responsable del Área de Formación del Centro de Estudios del Románico de Madrid (C.E.R.M), Don Luis Gonzaga Montero Manglano.
A la hora en punto abría el acto el Concejal de Cultura, Sr. Vara, quien tras unas calurosas palabras de bienvenida a los alumnos y simpatizantes de CR entre asistentes e invitados a la conferencia, agradeció igualmente la asistencia del Padre Prior del Monasterio de San Lorenzo, Sr. Iturbe. El destacado miembro de la Junta de Gobierno Local y segundo Teniente de Alcalde del Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial, expuso con gran elocuencia las extraordinarias relaciones existentes entre su departamento1 y Círculo Románico, que durante el último lustro han aproximado el arte románico a esta localidad. La sobriedad de las aulas donde se imparten los diferentes niveles del curso "Monografías del Románico", a los numerosos alumnos de la población y la impartición de estas conferencias -resaltó-, se aúnan en el esfuerzo de calidad realizado por ambas entidades, en la defensa, difusión e investigación del Patrimonio Histórico heredado.
Tras un detallado recorrido por el curriculum de nuestro interviniente, el Sr Concejal agradeció la presencia de los miembros de Círculo Románico, así como un emotivo recuerdo al Presidente de nuestra entidad -ausente por compromisos familiares, Don Miguel Ángel Martín García-, realizando a continuación una concisa explicación de la importancia del arte románico en el desarrollo de la cultura europea y la necesidad de su preservación. Sin más preámbulos cedió la palabra al Responsable del Área de formación, Don Luis Montero, quien tras ampliar el recorrido por los méritos curriculares y de investigación del conferenciante, cedió la palabra al Iltrmo. Sr.
Tras su agradecimiento a los asistentes y a los organizadores del evento, nos sitúa rápidamente y de manera locuaz Don Wifredo Rincón, en la España de comienzos del siglo XIX. Los progresos sociales consecuencia de la industrialización y el desarrollo del ferrocarril en nuestro territorio, nos aproximan al persistente interés por el patrimonio, mostrado por los historiadores del romanticismo, con un especial énfasis en los sucesos que este turbulento siglo va a causar directamente sobre el románico, como consecuencia de las desamortizaciones de los bienes de la iglesia.
El largo proceso histórico de la desamortización española iniciado a finales del siglo XVIII por Godoy (1798) y cerrado bien entrado el siglo XX (16 de diciembre de 1924), fue un largo proceso económico y social, consistente en poner en el mercado -previa expropiación forzosa y mediante una subasta pública-, las tierras y bienes que hasta entonces no se podían enajenar (vender) y que se encontraban en poder de las llamadas «manos muertas», es decir, la Iglesia Católica o las órdenes religiosas que los habían acumulado como habituales beneficiarias de donaciones, testamentos, abintestatos y otros medios. Las fases mejor conocidas de este momento histórico serán, sobre todo, las de Juan Álvarez Mendizábal en 1836 y la de Pascual Madoz, en 1855, formuladas durante diversos gobiernos del reinado de Isabel II y que a raíz de esta situación acelerarán el abandono y la ruina -cuando no el expolio- de numerosas manifestaciones artísticas y otros elementos de nuestro patrimonio arquitectónico.
Comienza el Sr Rincón su recorrido por la visión de los historiadores del momento, con especial referencia a la obra del pintor romántico Jenaro Pérez de Villaamil y los dibujos realizados a partir de 1833 junto al dibujante escocés David Roberts por "LA ESPAÑA ARTÍSTICA Y MONUMENTAL". La reproducción de algunas de las láminas del burgalés Convento de las Huelgas, la Colegiata de Toro, San Pedro de Olite o del desaparecido Monasterio de Benevívere, subyugan la atención del publico asistente en la sala de Floridablanca. Muchos de estos viajeros por el románico del s.XXI, captan de inmediato en su capacidad de análisis, el mensaje que la conferencia quiere transmitir: el deterioro y la destrucción irrevocable que han sufrido muchos de estos monumentos en apenas 150 años. Continúa Don Wifredo sosteniendo, que los historiadores y pintores del romanticismo vuelven de continuo su mirada al período medieval, en busca de incentivos culturales que permitan relanzar el orgullo hispánico de una empobrecida y oscura nación del siglo XIX, un historicismo que igualmente es apoyado desde el exterior por David Roberts o Washington Irving con sus Cuentos de la Alhambra.
Y qué mejor muestra para ello que la obra de otro romántico, Francisco Javier Parcerisa i Boada (Barcelona, 1803 - 27 de marzo de 1875) dibujante, pintor y litógrafo, quien principalmente trabajó para cuatro historiadores, autores de los trabajos que se describen a continuación y que fueron publicados en "Recuerdos y bellezas de España", cuyo primer volumen fue publicado en 1839: Francisco Pi i Margall que se encargó del tomo dedicado a Granada; Pablo Piferrer, encargado de los dos volúmenes de Cataluña; Pedro de Madrazo que realizó los tomos correspondientes a Córdoba, Cádiz y Sevilla; y José María Quadrado que se encargó del resto de la obra.