Como bien es sabido por todos, los peregrinos a Santiago llegaban desde todos los rincones de Europa, estableciéndose diferentes vías que desembocaban en la Península. Desde Alemania, Austria, Italia, Reino Unido o Francia, llegaron gentes dispuestas a venerar al Santo.
Los peregrinos del norte y del centro de Europa, accedían a Francia por el camino Lemovicense. Los alemanes del sur, los suizos, los austriacos y los ...