Hola a todos

Hoy, la Iglesia recuerda a San Juan Evangelista, quien tuvo la inmensa dicha de ser el discípulo más amado por Jesús.

Primero, miramos una imagen muy conocida de San Isidoro de León; después, hablamos un poco sobre ella:



¿Por qué San Juan Evangelista es el único de los vivientes que sostiene un libro con las tapas de color blanco en San Isidoro de León?

En la iconografía románica, por encima del trabajo manual de los posibles artesanos sin instrucción, ya fuese un taller pictórico o de cantería, se encontraba el criterio del maestro o del teólogo redactor.

La fiesta de San Juan Evangelista todavía se celebra el 27 de diciembre: Navidad, San Esteban (el protomártir), San Juan Evangelista. El color litúrgico para este día es el blanco, un color con claras connotaciones tanto del ciclo de la Navidad como del símbolo de la virginidad, la condición en la que permaneció el discípulo amado, según cuenta la tradición cristiana.

¡Muchas felicidades a los Juan que, hoy, celebren su santo!
Un abrazo a tod@s.

Hola a todos

Hace ya algunos días que no tocamos este tema. Está claro la historiografía no para de hablar de los magníficos maestros escultores del románico. Sin embargo, si fueron magníficos en su oficio, lo fueron porque a su lado tenían hombres con un gran conocimiento, los teólogos redactores de sus diferentes programas.

Pongamos un ejemplo. La espléndida portada norte del templo de San Gereón, en Colonia, Alemania, es un claro ejemplo de lo que hemos escrito antes. El maestro escultor pudo hacer un magnífico trabajo, como se ve a simple vista; pero el teólogo redactor no se quedó a la zaga.



La portada está compuesta por:
1. Una escena superior en la que se representa la Anunciación, símbolo del equinoccio pascual.
2. Una escena lateral derecha en la que se representa a San Juan Evangelista, con el símbolo del águila, símbolo del solsticio de verano.
3. Una escena lateral izquierda en la que se representa a San Juan el Bautista, con el símbolo del cordero, del Agnus Dei, símbolo del solsticio de invierno.

Las tres figuras conforman un triángulo. En imágenes, nos encontramos ante el concepto del triángulo de fuego con el que se expresaba el paso de la luz de sol por los dos solsticios y los dos equinoccios.

Se tiene que recordar que según la fe, la Encarnación de Cristo se produjo en el mismo momento de la Anunciación; por eso, en la Edad Media, la datación Ab Incarnatione se iniciaba el 25 de marzo, nueve meses justos antes del día de Navidad.

Pero, tampoco se debe olvidar que si, en la Edad Media, el día 25 de marzo se celebraba la festividad de la Encarnación, ese mismo día también se recordaba el día de la muerte de Cristo, porque se creía que históricamente Cristo había muerto también un 25 de marzo, es decir, el momento histórico de la Pascua cristiana.

De nuevo, las festividades de los dos San Juan y su relación con el ciclo del sol.
Un abrazo a tod@s

Hola a todos

Ahora, que se acerca la festividad de San Juan el Bautista y, con ella, la celebración del solsticio de verano, quisiera recordar que el solsticio de invierno está asociado no solo con la Navidad de Cristo, el EGO SVM LVX MVNDI, sino también con la festividad dedicada al otro San Juan, el Evangelista, el 27 de diciembre, en plena semana de la Navidad.

Veamos una iconografía, sobre la que ya hemos dialogado alguna otra vez. Dentro de los personajes que acompañan a Cristo en la siguiente Santa Cena,


(Duomo de San Geminiano, Maestros Campioneses, Emilia Romagna)

destaca la figura de San Juan Evangelista, no sólo por el hecho de estar recostado sobre el pecho de Jesús, sino por dos detalles plásticos que hacen única su iconografía:

1. Es el único personaje que no viene connotado con la aureola; tal vez porque, en esos momentos, comparta la del propio Cristo. Es el momento máximo de la iluminación, de la Hagia Sophia, de la divina sabiduría.

2. Sobre el cuerpo de San Juan Evangelista y por encima del brazo diestro de Cristo hay pintado un sol.

Es el momento del triunfo del Sol, que vuelve a nacer.

En esta representación de la Santa Cena, se colocó el símbolo del sol junto al brazo diestro de Cristo y encima del cuerpo de San Juan Evangelista. Además, si ampliáis la fotografía, veréis que ese sol viene connotado con lo que parece ser una órbita elíptica que pasa por detrás del brazo diestro de Cristo. Esa órbita elíptica continuaría su recorrido por detrás del cuerpo de San Juan Evangelista.

En definitiva, los símbolos de la llamada teología de la luz, una teología propia del Arte Románcio que acabó renovando su estética para acabar renaciendo en el llamado Arte Gótico.
Un abrazo a tod@s