Hola a todos
Tal vez, esta entrada salga algo larga.
Demiguel, es que la iconografía de Bagüés tiene miga. Sin ir más lejos, esta magnífica iconografía de la Samaritana y el pozo
le podía servir al sacerdote de turno para, en un sermón, hablar a sus feligreses de la necesidad de estar bautizados dentro de la Iglesia, pues la Samaritana era un símbolo analógico de la Iglesia; el agua del pozo, del bautismo que es Cristo.
Lo curioso del caso es que si ese sacerdote predicase de esta manera estaría demostrando que tiene una gran preparación académica pues o había recibido instrucción o conocía un libro de Eriúgena. Por cierto, no sé cuántas veces ha salido este autor en referencia a la teología de estas pinturas a lo largo del desarrollo de este tema:
Venit mulier ex Samaria haurire aquam. Samaria ut praedissimus, figuram gentium suggerit. Mulier egressa de Samaria Ecclessia est, ex ipsis gentibus collecta, que suscepta fide veritatis, fonten ipsius, id est Christum, haurire desiderat.(Juan Escoto Eriúgena)En pocas palabras, la Samaritana es la analogía de la Iglesia y, en ella, se pueden salvar todos por la fe a través del bautismo (fuente) que es Cristo. Además, Eriúgena coloca aquí uno de sus conceptos teológicos más utilizados en la Edad Media, el EGRESO (Mulier egressa de Samaria). Nos encontramos ante una imagen que es un compendio de eclesiología, sólo dentro de la Iglesia pueden salvarse los que tienen verdadera fe. Es una buena base para un sermón. El teólogo redactor de este magnífico programa iconográfico pictórico estaba bien instruido.
De nuevo, hay que recordar que Bagüés pertenece al arciprestazgo de la Valdonsella, como Biota, un territorio civil en lo aragonés, perteneciente en lo eclesiástico al obispado de Pamplona. En Bagüés, como en los lugares adscritos al llamado Taller de Biota, el teólogo redactor utiliza como apoyo la teología de Juan Escoto Eriúgena.
En estos momentos, como el Grupo Ailbe puso de manifiesto, no vendría mal recordar que, en lugares como Jaca y Loarre, pertenecientes tanto en lo civil como en lo eclesiástico a Aragón, sus teólogos redactores abogaron por el seguimiento o fidelidad a la romanitas. Un pensamiento que basaron tanto en las dos Epístolas de San Pedro como en los textos fundacionales de la Iglesia, extraídos de los Hechos de los Apóstoles, en los que se pondera la figura de San Pedro, sin descuidar el Evangelio de San Marcos, el texto canónico que se consideraba el resumen de las predicaciones del propio San Pedro. Además, tampoco se debe olvidar que estos teólogos redactores tomaron directamente elementos de la propia cultura clásica.
Sin embargo, como se pone de manifiesto una vez más, en las iconografías de Bagüés y el arcedianato de la Valdonsella, se dio la presencia de teólogos redactores que hablaban de manera diferente, pues aunque para elaborar sus imágenes también utilizaban textos canónicos, se atrevieron a utilizar conceptos de naturaleza teológica basados en el pensamiento de Juan Escoto Eriúgena difundidos a partir de las grandes escuelas catedralicias europeas. Ahora, bien, en la Valdonsella estamos en el obispado de Pamplona. Ya callo. Sorprendente este románico aragonés.
Un abrazo a tod@s