Supongo que sabes que Pedro Manrique es amigo mío desde niño, casi hermano, por eso le cité en la conferencia de la tarde de Reyes. Él estuvo en la iglesia de Santiago el pasado día de Reyes, incluso me ayudó a colocar enchufes, pantallas, ordenador. Estuve con él varias veces esos días; con él, con su mujer, con su hija, con su yerno, con su nieto Guillermo, casi un recién nacido, ¿algo más? No conseguirás enfrentarnos, Jesús. Pedro es mi amigo. Somos amigos y los dos lo sabemos. juntos hemos estado desde el momento en que los dos nacimos (somos quintos: la niñez juntos, la escuela juntos, mi casa la suya, la mía de él…) Cuando Pedro fue alcalde, me invitó a pregonar las fiestas de Turégano desde el balcón de la plaza; hasta entonces, los pregones de fiestas los daban forasteros ilustres (todos, los de antes y los de ahora me citan, habla de la villa y reconocen que lo saben porque me han leído en alguno de mis libros. El de Turé gano fue el primer pregón de fiestas que di fuera de la provincia de Toledo. Mi primer cargo político fue el de Delegado Provincial del Ministerio de Cultura en esa provincia y en todos los pregones que di en esa provincia aprovechaba para hablar de democracia, de solidaridad, de tolerancia y de la cultura e historia de los pueblos y ciudades donde se me invitaba. En la conferencia del pasado día 6 cité a Pedro, a él y a su hijo Pedro, mi amigo también. Incuso de cuando los dos leíamos FIAT en los pies del apóstol de Turé gano. Es tu página, Eadam. Puedes decir lo que quieras en ella, solo faltaba, incluso insultarme como sueles hacer. Puedes seguir diciendo que yo hago las cosas “de forma hartera y sañuda” (supongo que querrías decir “hortera” pues “artera”, que yo sepa, se escribe sin h y tú eres perfecto en todo, por eso nunca te equivocas, ¡qué suerte tienes!) Por favor, Jesús, no hables más de mí, te lo ruego. A cambio, te prometo, si así lo deseas, no volver a intervenir en ella (no soy de los que dicen “ladran luego cabalgamos”). Te lo cuento casi camino ya del aeropuerto. Confío en no encontrarme a la vuelta con otro ataque tuyo.
Saludos al Foro. Ellos merecen más respeto, Eadam. El pasado jueves, hasta mi paisano y amigo Eduardo, el dueño de La Casa Vieja, me lo decía.
|