De hecho, Xavidc, las otras modas más que a los efectos de la expansión se deben a los efectos de Beda el Venerable y su tropa. Saludos.

Hola a todos

Hoy, para animar un poco a nuestro querido amigo Eadan quien todavía nos anda medio de vacaciones , quisiera recordar esto:


Huidobro, Burgos.

Fuente Urbel, Burgos.
¿Estará, hoy, por ahí demiguel?
Un abrazo a tod@s

¡¡Qué va!!
Omites el ogmios de La Piedra, del mismo autor que Fuente Urbel. De paso, hago votos para una pronta retirada del retablo barroco de la iglesia de esta población que todo el mundo sabe que está tapando un retablo pétreo románico de contenido desconocido, dándose la circunstancia de que la configuración arquitectónica de la iglesia de La Piedra permitiría un avance de este retablo y acceso al pétreo como se hizo en Turégano de Segovia. De nuevo en La piedra, como ocurre en su vecina Fuente Urbel, alguien hace lo indecible sibilinamente para mantener en silencio algo que podría incomodar. "Peles a la postre". Saludos.

Hola a todos

Memoria, aunque ya gótica, si no me equivoco, de nuestros amigos scotti acerca del camino de Santiago:

Se encuentra en Jerpoint Abbey, Co. Kilkenny.
(De la web ecclesiasticalireland.org)
Un abrazo a tod@s.

Very good, thankyou. Hasta 1970, según fecha del libro, lo único que se sabía en general de las peregrinaciones irlandesas a Santiago es que debían haber sido abundantes para justificar el hecho de que en Dublin se hubiese erigido un hospital de peregrinos a Santiago.
Sin embargo, en 1.996, en Tuam, en una excavación se descubrió la tumba de un caballero con venera, y algo semejante ocurrió en 2.000 donde al cadaver, además de acompañarle la venera también le acompañaba una figurita en forma del apostol Santiago.
A partir de aquí se iniciaron una serie de estudios que han evidenciado la salida de peregrinaciones desde diferentes puertos de Irlanda. Algunas se dirigían a Burdeos, donde desembarcaban y continuaban a pie por la vía lemosina, pero la mayoría desembarcaban en A Coruña (supongo que Betanzos, a juzgar por lo que en su día expuso Mati).
Para más divertimento, me consta que en la nómina de canteros que participaron en la construcción de la catedral de Santiago, al menos había uno irlandés.
Por cierto, cruzar navegando el golfo de Vizcaya era algo que se hacía con harta frecuencia en el abundante tráfico comercial entre ambas islas británicas y la península ibérica.
De manera que, gracias Corbio, por añadirnos un nuevo referente. Saludos.

Hola a todos
Miguel cuánta razón tienes. Una nueva cita para, una vez más, poner de manifiesto la relación de estos dos conceptos, la peregrinación y la navegación, en la cultura irlandesa.


Parece ser que estos irlandeses o Scotti se movieron y en barca, quiero decir, navegando.
Un abrazo a tod@s.

Si no ponemos orden...se nos va a estropear la paella...
La isla de Irlanda estaba dividida originalmente en territorios familiares que luego se transformaron en siete reinos. Esa costumbre de peregrinar sin retorno procede de la época de las familias (prehistoria digamos hasta s.I o así) en las que el que la liaba era desterrado a otra familia, a otro territorio; costumbre que siguió ya en la época de los siete reinos (con Tara como prevalente). Mientras, la iglesia formada por los seguidores de san Patricio, que era cristiana, pero no romana, se fue organizando, repartiendo también el territorio en diócesis, que al final, cuando la invasión inglesa-cisterciense de la segunda mitad del siglo XII, eran cuatro siendo la de Armagh la más importante. Dicha estructura era como federalista y en cada diócesis se iba por libre, lo que dió lugar a un progresivo deterioro de costumbres y a la reacción de San Malaquías pidiendo el apoyo papal para la citada invasión inglesa y a san Bernardo para la invasión cisterciense.
Mientras, algunos monasterios habían venido descollando, llegando a formar los grandes colegios en que se formaron miles de hijos de nobles continentales.
En torno al año 1000 llegaron los normandos, pero no los normandos ya educados, sino los vikingos, que hicieron lo que les dió la gana y que algunos se quedaron, como el mencionado que fundó Dublin. Esta llegada de los vikingos originó la diás pora de los estudiantes y generó un excedente de monjes que emigraron al continente, uniéndose a los que ya había peregrinado.
Aún así, calmados los vikingos Irlanda continuó su vida normal hasta la comentada invasión del siglo XII que de nuevo originó una nueva diáspora de monjes. Algunos de éstos llegaron a Alemania, donde fueron bien recibidos al hacerse benedictinos, y otros fueron a otros lugares, como a Hispania, donde no se hicieron ni benedictinos ni parecidos, pero que continuaron la práctica de identicarse con las costumbres locales.
No sé si la he liado más. Saludos.

M;e he divertido un rato volveiendo a releer este tema en cuestión, pues en Vallejo de Mena, tierra interior castellana, se esculpe una barca un tanto singular que nos recuerda la Peregrinatio propter Christum ; un viaje hacia Dios, sin retorno, que nos recuerda una de las máximas del monacato iro escocés en la Hispania del s.XII: