Hola a todos
Eadan, tienes razón. El estudio del Arte Románico es muy amplio. y esperemos que haya personas que se animen a participar en este tema. A modo de ejemplo, pongo otro de los campos de estudio que se pueden analizar, el de la numerología; es decir, el valor simbólico de los números tanto en su visión plástica como en las diferentes realizaciones arquitectónicas. Pongamos un ejemplo.
Primero, coloco una fotografía que reproduce la imagen de una figuración geométrica que, a partir de la idea de la estrella de David, parece querer hablar de un número simbólico,
el seis (6), ese número que hace referencia al
hombre en el neoplatonismo cristiano.
Se encuentra en San Vicente de la Barquera, Cantabria. Hay que tener en cuenta que, en el número seis, los filósofos medievales neoplatónicos veían el concepto de la perfección:
Citar:
“El número seis no se excluye de la unidad y de la multiplicación de los otros, sobre todo cuando solo él es perfecto en los cardinales, esto es, en la primera serie de los números que van desde uno hasta diez. Pues se realiza en sus partes, a saber, la sexta, la tercera y la mitad. En verdad, la sexta es uno, la tercera, dos, la mitad, tres, las cuales simultáneamente unidas hacen la cantidad de seis; ciertamente, uno, dos y tres se hacen seis.”
(Juan Escoto Eriúgena, Periphyseon)
Una perfección que puede ser interpretada por la arquitectura de de esta manera:
Se trata de la torre campanario del Duomo di Santa Maria dell'Assunta de Siena, la Toscana italiana, su numerología lo deja claro: seis (6) pisos con seis vanos que tienen una correlación de huecos en la disposición: 1,2,3,4,5,6. Pero qué ocurre si sumamos todos estos números: 21 (2+1=3), o lo que es lo mismo, lo que escribió Juan Escoto Eriúgena:
Citar:
Pues se realiza en sus partes, a saber, la sexta, la tercera y la mitad. En verdad, la sexta es uno, la tercera, dos, la mitad, tres, las cuales simultáneamente unidas hacen la cantidad de seis; ciertamente, uno, dos y tres se hacen seis.
En un templo dedicado a la Asunción de María, la torre es un buen símbolo para indicar el camino que conduce a la naturaleza humana hacia el cielo. Como otras veces ya hemos escrito, así como el templo románico es en sí mismo el gran símbolo de la naturaleza divina de Cristo, la torre románica se convierte en el gran símbolo de su naturaleza humana reflejada en la simbología del número seis.
De hecho, en el Románico, hasta los detalles más mínimos están pensados como símbolos de la
HAGIA SOPHIA, la Divina Sabiduría.
Se trata de la famosa torre de Sant Climent de Taüll. En esta ocasión, la famosa torre de Sant Climent de Taüll. Nos encontramos con otra torre románica construida en seis cuerpos, pero ¿qué pasa si ordenamos sus vanos o ventanas de abajo arriba? Se produce esta progresión:
Piso 6, 2 vanos
Piso 5, 2 vanos
Piso 4, 2 vanos
Piso 3, 3 vanos
Piso 2, 2 vanos
Piso 1, 1 vano
Mientras los tres primeros vanos están construidos con esta relación: 1+2+3, que parecen querernos hablar de Dios a través de la idea de la Trinidad; los tres últimos lo hacen con esta otra: 2+2+2, que parecen querernos hablar del hombre, constituido macho y hembra en los tres períodos de la historia de la Salvación: Antiguo Testamento, Nuevo Testamento, Tiempo de la Iglesia.
Además, si sumamos todos los vanos (1+2+3+2+2+2) nos dan un total de 12, es decir el número de la las doce tribus, de los 12 discípulos y de la Jerusalén Celeste. Por eso, el valor simbólico del número seis y su relación con la idea del hombre.
Citar:
El número seis -el hombre fue creado en el sexto día la creación- es otra indicación de la perfección del hombre y de su condición de "microcosmos" que encapsula en él la totalidad de la creación.
(Agnieszka Maria Kijewska, El fundamento del sistema de Eriúgena)
Nada, una numerología que nos recuerda la perfección del hombre en el momento de su creación y, de paso, tal vez este simbolismo: mientras el templo es la expresión de la divinidad de Cristo; la torre románica lo es de su humanidad.
Un abrazo a tod@s