
Las similitudes entre el calendario Hebreo y el Celta, únicamente pueden ser supuestas, consecuencia del déficit de información que poseemos respecto del segundo en comparación con el primero; no obstante trataré explicar, cómo en el calendario lunar se calculan los años según los ciclos de la luna en lugar de los del sol, como hacían una gran mayoría de culturas en la antiguedad.
En el calendario lunar, cada mes comprende la totalidad de los períodos de una lunación, entre dos momentos en que la luna se halla exactamente en la misma fase lunar. Teniendo en cuenta que cada mes lunar comprende 29,53 días solares, el desfase de medio día solar daba lugar a la alternancia entre meses de 29 o 30 días, sucesivamente y así un mes con otro, cada día del mes lunar se correspondería con una fase lunar. Las fases de la luna a las que se conoce hoy con un nombre concreto, son: Luna Nueva, Cuarto Creciente, Luna Llena y Cuarto Menguante. Estas fases lunares, aún junto a las subdivisiones por las que deambula la Luna de una fase a otra, se asocian con diferentes porcentajes de iluminación o ángulos de fase, que van desde el 0% en la luna nueva, al 50% en los cuartos y el 100% en la luna llena.
Volviendo al 'desajuste' de medio día, producido por la sucesión de la fase del mes lunar, en relación al calendario solar -(29,53 días por mes lunar X 12 = 354,36 días)- y para ajustar ambos, el calendario hebreo desarrolló el método embolismal, un año 'preñado' con un mes más Adar "A" (אדר א, "Adar álef"), que consistía en agregar un mes de 30 días cada tres años en un ciclo de ocho.
En el siglo -V adC, se perfeccionó todavía más el sistema, estipulándose que desde ahí en adelante, el mes agregado habría de hacerse en siete años por cada ciclo de diecinueve. Se estima que dichas técnicas tenían sus raíces en los conocimientos de astronomía de los babilonios y caldeos -muy adelantados para su época-, lo que pèrmitió al astrónomo griego Metón en el -432 bC, crear unas tablas solilunares -conocidas como ciclo metónico- que son aceptadas hasta el día de hoy, pues llegó a establecerse que los 6.939,75 (19 X 365,25)días de 19 años solares, equivalen a un tiempo muy similar al que abarcan sus 235,0068(=6939,75:29,53)meses lunares. El DRAE define como ciclo lunar, un ciclo decemnovenal o decemnovenario, en alusión al
"período de 19 años, en que los novilunios y demás fases de la Luna vuelven a suceder en los mismos días del año, con diferencia de hora y media aproximadamente". Un siglo después, otro astrónomo griego, Calipo de Cícico, ideó el ciclo cuádruple de 76 años -llamado calípico- para reajustar el metónico, al cuadruplicar el número áureo. De esto se deduce que cada 19 años coincidirán entre sí las fechas del calendario hebreo y el gregoriano, aunque no se corrigieron desfases de uno o dos días, consecuencia de movimientos semanales efectuados en el calendario hebreo por motivos religiosos. Poco después, el sabio Hilel II perfeccionó los cálculos y métodos conocidos del calendario hebreo, al establecer los mecanismos del 'embolismo' anual, utilizados hasta el día de hoy y que han sido corroborados por las últimas y más modernas observaciones astronómicas.
Dichos cálculos ya eran conocidos desde cientos de años atrás, pero hasta aquellos tiempos se preferían los métodos empíricos para establecer el comienzo del mes —
dos testigos que habían de atestiguar ante el gran Sanedrín que habían visto el naciente de la Luna—(1) y el comienzo de la primavera, basándose en la maduración de las mieses y a la llegada del equinoccio (hacia el 21 de marzo en el hemisferio norte), que es la fecha en que el día y la noche tienen la misma duración; mientras que el almanaque era utilizado en caso de impedimentos, como días nublados.
Esto era así desde los tiempos antiguos, pues la aparición de la nueva Luna Creciente al ponerse el sol, tras varias noches sin luz, señalaba el comienzo del primer día de cada nuevo mes, y no la Luna Nueva astronómica. El rabino, popularmente podría explicar de esta manera, que la temporada del año nuevo dura hasta después de Yom Kippur (el día de la expiación) -el 10 de Tishri, que cae aproximadamente entre septiembre y octubre-, el día más solemne de todo el año y que es cuando todos los judíos deben concurrir a la sinagoga.
A continuación veamos algunos datos del calendario Celta.
NOTAS:
-----------(1)-The Jew of the Century. Morris B. Marǵolies; Vile-Goller/Fine Arts, 1965 - 295 páginas; pág.: 50.
- Twenty/twenty: Jewish Visionaries Through Two Thousand Years. Morris B. Marǵolies Jason Aronson, 2000 - 263 páginas; pág.:39