Queridos amigos:
En esta tarde tormentosa y gris, os invito de nuevo a sumergirnos en la historia del ¿tapiz? de Bayeux y sus suculentos misterios, como la galleta en el té que me estoy tomando para merendar...
Vamos hoy con algunas investigaciones realizadas sobre el tema de las
fábulas en el TB. Las nueve principales que se representan seguidas, entre las escenas IV (Harold embarcando) y la VIII, son:
el zorro y el cuervo; el lobo y el cordero; el parto de la perra; el lobo y la grulla, el león tirano; el ratón, la rana y el milano; el lobo y la cabra; la caza del león; y el hombre que sembraba lino.

angelfire.com
De todos los estudios realizados, es fundamental el que realizó Héléne Chefneux, identificando y buscando el origen de ocho fábulas de tradición esópica que aparecen en el tapiz. Otros investigadores han hipotetizado sobre la existencia de varias más, y lo que sí ocurre es que varias de las primeras se vuelven a repetir, lo que hace pensar en que podrían relacionarse con las escenas desarrolladas sobre ellas.

mythfolklore.net
Nos centraremos hoy en la primera, "
El zorro y el cuervo", a los que vemos en la típica escena del queso que sostiene el ave sobre un árbol. Ilustraciones con una disposición similar se han encontrado en manuscritos de la época, como el de Ademar, o en posteriores, como este de Steinhöwel:

Se trata una de las fábulas más reptidas (
3 veces), y tanto por su colocación dentro de la historia como por la disposición de los personajes, distinta en cada una, ha contribuido, según Joaquín Rubio Tovar (Universidad de Alcalá) a forjar la hipótesis, basada en la versión de Eadmer de Canterbury, según la cual
Harold sería el cuervo insensato, pues no escuchó las advertencias y se entregó a las argucias del
"zorro" Guillermo, que consiguió que el primero jurase sobre las reliquias.
En la primera aparición, que vemos más arriba,
el cuervo se sitúa a la izquierda (por donde viene Harold), y el queso puede simbolizar el banquete que disfrutan Harold y sus compañeros: el inglés, engañado,
deja caer su botín en manos de Guillermo el Conquistador.
En la segunda, situado en el viaje hacia Bretaña, el queso ha pasado estar en la boca del zorro: Harold y Guillermo cabalgan juntos hacia la realización de la traición-juramento y su nombramiento como caballero:

En la tercera ocasión, durante la vuelta a Inglaterra de Harold, la fábula se sitúa en la parte superior, con la diferencia de que
las posiciones están cambiadas, y además de que se encuentran separados por dos barras (éstas simbolizarían el Canal de la Mancha, pues Guillermo queda en Francia), el queso vuelve a estar en el pico del cuervo. Es curioso observar también como Harold ha perdido el mostacho que le caracterizaba, y que ha sido visto como una señal de su "prostitución":

Hay que tener en cuenta que estas fábulas, al igual que ocurre en los márgenes de los manuscritos o en las esculturas de los edificios, podrían tratarse de interpretaciones satíricas en las que el artista desarrolla su punto de vista personal. Dice
Bemstein, para reforzar la posibilidad de que algunas de las fábulas no se usaran para sostenerla versión pro normanda, sino para subvertir este punto de vista con comentarios irónicos, observemos la clase de personajes que triunfa en ellas. Frente al justo y valiente Guillermo de los cronistas franceses, triunfan el lobo o el zorro. Muchos de los que alcanzan sus objetivos lo hacen usando el engaño, la traición o, incluso, la fuerza física. Quienes sufren son inocentes o poco inteligentes. Reinan el fraude y la violencia. En cualquier caso, no resulta fácil considerar las fábulas como simple ornamento. (J.Rubio Tovar)
Abrazos.