, ha sido realizada de manera tal que permite hacernos una idea de las extraordinarias dimensiones de Hagia Sophia.
Os enlazo una entrada anterior para identificar el deseo del emperador Justiniano I en relación con la creación de una iglesia única, con sede en Constantinopla, una edificación que ha de dar el suficiente crédito a su intento de restablecer el viejo Imperio.

El emperador Justiniano (En latín:
Flavius Petrus Sabbatius Iustinianus; en griego: Ιουστινιανός), nacido en Tauresium, 11 de mayo de 483 y fallecido en Constantinopla el 14 de noviembre de 565, hubo de recurrir al derramamiento de sangre, pero logró salvar su trono. La rebelión conocida en la historia bizantina como la revuelta "Niká", destruyó Santa Sofía y es denominada así, como consecuencia a que los rebeldes en varias ocasiones durante el transcurso de la rebelión, invocasen de viva voz "Niká", el nombre de la diosa de la victoria hacia el 532 de la Era. Tras estos acontecimientos, el emperador Justiniano ordenó la construcción de un nuevo Templo que iba a superar en magnificencia las edificaciones anteriores. Él mismo se autoimpuso una labor infatigable en su ambición de recuperar el Imperio, sustentado por la construcción de una 'única' Iglesia cuya sede en Constantinopla representase a su vez el símbolo del poder del cristianismo como religión en el Imperio de Oriente. Los historiadores escriben que personalmente supervisó las obras de Haigia Sophia y que hizo pleno uso de todo el poder que su gobierno podía ofrecer, ya que todo ello formaba parte de un magno proyecto de restauración del Imperio romano (
Renovatio imperii romanorum), por el que será recordado como "El último emperador romano"; incluso cabría la tentación de apodarlo “padre de la Iglesia” -al menos de la Ortodoxa-, debido a la instauración de numerosas normas sobre donaciones, fundaciones y la administración de la propiedad eclesiástica; la elección y derechos de los obispos, sacerdotes y abades o la regulación de la vida monástica; las obligaciones de residencia del clero, el modo de llevar a cabo las ceremonias, la jurisdicción episcopal y hasta la construcción de edificios religiosos, maneras y normas recogidas tanto el Codex Iustinianus como en las Novellae. La Iglesia Ortodoxa venera a Justiniano I como santo el día 14 de noviembre. En el Mapa del Imperio Bizantino en 550 d.C. pueden verse -en verde- las conquistas realizadas durante el reinado de Justiniano I, debido a sus conocidas Campañas contra el Reino vándalo (533 – 534), el Reino Ostrogodo (540 – 554), el Reino Visigodo (552) en Hispania, el Imperio Sasánida o frente a los Eslavos, durante las que además persiguió y abolió las religiones no cristianas, defendiendo igualmente el sentimiento de
'romanitas' que se encuentra en este siglo VI de manera amplia muy extendido por todo los territorios históricos y que es correspondido por la ideología oficial del gobierno imperial, según la cual, el Imperio no se hundió en Occidente, sino que los bárbaros gobiernan allí en nombre del emperador de Oriente y por parte de la
intelligentia de Constantinopla.

Los dos arquitectos más famosos de la época, Antemio de Tralles (Aydin) e Isidoro de Mileto, se encomendaron a la construcción del edificio, que fue continuamente supervisado por más de cien maestros constructores y diez mil trabajadores.
Los mejores y más raros materiales de las cuatro esquinas del imperio fueron llevados a Constantinopla para ser utilizados en la construcción de Santa Sofía: Las ricas columnas anteriormente llevadas a Roma de un templo egipcio en Heliópolis, el marfil y los iconos de oro con otros ornamentos de antiguos templos en Éfeso, Kizikos y Baalbek, entre otros, que permitó concluir la construcción en un tiempo muy corto, cinco años, diez meses y cuatro días, comprendido entre el 23 de febrero 532 al 27 de diciembre de 537, día en el que durante la ceremonia de
'consagración', el emperador Justiniano dejó de lado las formalidades de Estado y entró en la Iglesia con entusiasmo, y sin decir una oración de gracias a Dios por haberle permitido cumplir su deseo más querido, parece ser que exclamó con orgullo, recordando el templo de Jerusalén "¡Oh, Salomón, te he superado!". Más tarde, la iglesia fue dañada varias veces por diversos cataclismos e incendios, y tuvo que ser reparada continuamente y reforzada, tras los terremotos de agosto de 553 , enero 557 y mayo del 559, que destruyeron la parte oriental de la cúpula. Los daños fueron reparados por el sobrino del arquitecto original, Isidoro y se aumentó la altura de la cúpula 2,65 metros, construyendo contrafuertes en forma de torres que apoyaron su peso.
El 9 de febrero 869, durante el reinado del emperador Basil I (867-886), un terremoto dañó el lado oeste del edificio. Y el 25 de octubre de 986, otro violento terremoto provocó el colapso del ábside occidental , que causó daños parciales a la cúpula. El Templo tuvo que ser cerrado hasta que el arquitecto Tridat terminó la reparación en 994.

Ya en 1204, la Iglesia fue saqueada por los cruzados de la IVª y durante el reinado del emperador Miguel VIII (1261-1282), Hagia Sophia fue rehabilitada por el arquitecto Ruchas que le añadió diversas edificaciones en la parte del sur-oeste; en 1317, durante el reinado del emperador Andrónico II, el nordeste y el sur-oeste de los muros se reforzaron en el exterior por contrafuertes en forma de pirámide y en 1348, la mitad oriental de la bóveda se derrumbó, pero fue posteriormente reparada, pero ya en la primera mitad del siglo XV, los viajeros y otras fuentes describen Santa Sofía en un avanzado estado de deterioro. Finalmente, cuando los turcos conquistaron Constantinopla en 1453, la Iglesia se convirtió en una mezquita, un lugar de culto islámico y en el sigo XVI, los frescos y las cifras de mosaico de los santos cristianos que decoraban las paredes, fueron totalmente cubiertos por el yeso, ya que el código islámico prohíbe la representación figurativa.
Desde los comienzos de esta segunda era, la tecnología empleada, los materiales y el
modus operandi, serán un ejemplo de arquitectura sagrada replicado en otras latitudes, durante la Edad Media e incluso hasta bien entrada la era moderna, siendo especialmente deudora la arquitectura románica de lo 'bizantino' como trataremos de explicar en próximas entradas, siguiendo lo postulado en el artículo
árbol genealógico del románico, de nuestra web.